Sharai Rocha/El Nacional
Saliendo de Monterrey por la carretera 40 a Saltillo, Coahuila, se encuentra la desviación hacia el municipio de García, Nuevo León, cuya cabecera se sitúa a 30 km de la capital del Estado.
García, es considerado un tranquilo pueblo de provincia cuyo principal atractivo reside en sus sorprendentes y fascinantes Grutas de García, localizadas a sólo 9 km de la población.
Las Grutas de García, situadas en el cerro del Fraile, tienen entre los 50 y 60 millones de años aproximadamente. Fue hasta el año de 1843 cuando fueron descubiertas por el sacerdote Juan Antonio Sobrevilla, quien durante una excursión dio casualmente con ellas. La primera exploración espeleológica fue llevada a cabo por Ignacio Marmolejo.
Estas están rodeadas por un paisaje desértico y rocoso en el que existen numerosas cavernas; poseen una longitud total de 300 metros y una profundidad máxima de 105 metros. Se dice que en épocas prehistóricas estuvieron sumergidas bajo el mar, por eso en sus partes se pueden observar restos de fósiles marinos, como conchas y caracoles.
Para llegar a la boca de las grutas pueden seguirse dos rutas: la más fácil y rápida es tomando el moderno teleférico que recorre 625 metros en 3 minutos y asciende 280 metros hasta la estación el mirador constantemente sube y baja visitantes al lugar; la segunda implica el gusto por el ejercicio al aire libre, así como una mayor disponibilidad de tiempo, pues consiste en el ascenso a pie por una vereda.
Una vez que se alcanza la entrada de las grutas, pueden realizarse el magnífico trayecto que tiene una duración aproximada de dos horas, durante las cuales se recorre una distancia de 2.5 km y se visitan más de 30 salones del interior.
Para el recorrido es recomendable usar ropa y zapatos cómodos, pues el interior de las cavernas incluye el ascenso y descenso de un buen número de escalones. Además la temperatura promedio en el interior de las grutas es de 18°C durante todo el año; así, en verano no se siente calor y en invierno no hay frío.
En el interior se pueden observar las impresionantes formaciones rocosas que llenan el espacio de los salones y los guías ofrecen interesantes comentarios sobre la historia del lugar. Asimismo, brindan imaginativas explicaciones sobre los nombres dados a las figuras formadas por las estalactitas y estalagmitas esculpidas por la naturaleza.
Algunas de las salas más famosas por su hermosura y espectacularidad son: “La octava maravilla”, formación en la que se unen una estalactita y una estalagmita para completar una columna; “El salón del aire”, donde se encuentra un balcón de 40 metros de altura con una espléndida vista y “El mirador de la mano”, desde el que se contempla una sorprendente estalagmita con forma de mano.
También existen numerosas estructuras realmente fascinantes debido a la conformación de las rocas y a la magnífica iluminación de las grutas, como “El teatro” y “El árbol de Navidad”, “La Gloria”, entre otros.
Además de las grandezas naturales que se aprecian en el interior de las cavernas, el paseo a las Grutas de García puede complementarse con la visita tiendas de souvenirs, aéreas para montar a caballo, snacks, entre muchas otras cosas.