Tras una reducción del 40% durante las tres últimas décadas en el país, pasando de 45 mil ejemplares en 1998 a 28 mil en la actualidad, Kenia ha lanzado este miércoles un plan de protección y recuperación de jirafas.
Nombrado como el Plan Nacional de Recuperación y Acción para Jirafas, el programa cuenta con el apoyo financiero del Servicio de Conservación de la Fauna de Kenia y algunas organizaciones conservacionistas.
El encargado de presentar la propuesta fue el ministro keniano de Turismo y Fauna, Najib Balala, quien la describió como una obligación para las instituciones kenianas.
Se prevé que el plan se desarrolle en el transcurso de los próximos cinco años y las medidas principales son: combatir los desafíos causados por el ser humano, restaurar la destrucción y fragmentación de su hábitat, disminuir hasta un 50% la caza furtiva y bloquear las enfermedades contagiosas.
Aunque se sabe que hay una crisis en cuanto a está especie, las jirafas aún no han sido incluidas en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadasde Flora y Fauna Silvestres, ya que no existen datos suficientes sobre su comercio internacional ni la manera en que se lleva a cabo.
Más en las leyes de Kenia si se les reconoce como especie en peligro de extinción, por los que ahora que se ha obtenido apoyo político del ministerio, van a implementar esfuerzos por salvarla y mejorar su hábitat natural.