Redacción/El Nacional
Autorizados por el municipio de Monterrey, puesteros regresaron a las calles que rodean la Basílica de Guadalupe, y con ello regresó el caos y las molestias para los vecinos del sector.
Los vendedores ofrecen desde comida y artesanías hasta flores y dulces en las calles de la Colonia Independencia.
Para vender sus mercancías, los ambulantes utilizan mesas de plástico o madera colocadas en las calles y estructuras de metal, con la que improvisan sus puestos. Pero el tumulto derivado de estos, provoca que, por ejemplo, la vialidad en la calle Libertad, a la altura de Zacatecas, se vea interrumpida.
Habitantes del sector señalan que batallan para tomar el camión o sacar sus autos de las cocheras, ya que la entrada y salida a la colonia se ha visto obstruida por las fechas.
Cabe recordar que en el año 2000, durante la administración del ex alcalde Felipe de Jesús Cantú, se modificó el reglamento municipal para prohibir la instalación de puesteros a menos de 100 metros de iglesias y templos religiosos. En ese entonces, el ex edil, reubicó a los vendedores en la llamada Feria Guadalupana, instalada en el Río Santa Catarina, que tras el paso del huracán “Alex” se volvió a reubicar en Ciudad Deportiva.
El pasado miércoles, el Alcalde Adrián de la Garza, otorgó permisos para que los puesteros pudieran instalarse en los alrededores de la Basílica. Esto provocó que los vecinos no puedan dejar sus vehículos enfrente de sus domicilios, o que no los puedan sacar de sus cocheras, además de lidiar con el ruido.