Este sábado, un grupo de manifestantes arremetieron contra un centro religioso hindú,en el sur de India, y lo incendiaron por apoyar la decisión de la Corte Suprema de permitir que mujeres en edad de menstruar puedan entrar a uno de los sitios de peregrinaje hindú más grandes del mundo.
Durante el siniestro, los atacantes también quemaron algunos vehículos que se encontraban en la zona, informó el dirigente del centro en el estado de Kerala, Swami Sandeepananda Giri.
Por su parte, Giri culpó al Partido Popular Indio del primer ministro Narendra Modi del ataque. El partido exige que el gobierno estatal, dirigido por el Partido Comunista de la India (Marxista), apele la decisión de la corte.
La entrada de mujeres entre las edades de 10 y 50 años al templo centenario estuvo extraoficialmente prohibida durante varios años y se legalizó en 1972. En 1991, el máximo tribunal de Kerala ratificó la prohibición que el mes pasado fue derogada por la Corte Suprema.