El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) invertirá 360 millones de pesos en el año del 2017 para la adquisición de mastógrafos, esto para poder combatir el cáncer de mama y detectarlo a tiempo.
En 2012, la dependencia médica hacía un millón 200 mil mastografías al año; en 2015, llegó a un millón 300 mil mujeres revisadas y el objetivo es que en 2017 llegue a un millón 400 mil mujeres que acudan a revisarse una vez al año para detectar la enfermedad.
“Antes, la prevención solía ser un servicio médico accesorio. Hoy queremos que sea central. A principios del próximo año vamos a presentar un modelo de prevención que se tiene que anticipar a que sucedan los riesgos”, afirmó Mikel Arriola, director del IMSS.
“Cada unidad médica familiar va a tener que certificar que le hizo una mastografía a todas las mujeres entre 40 y 60 años de edad adscritas a esa unidad. Los médicos van a tener que hacer el esfuerzo y tenemos que incrementar la comunicación con las universidades para tener más especialistas. Va a ser un esfuerzo de mediano plazo pero estamos casi duplicando todo el presupuesto en mastógrafos del IMSS”, agregó Arriola.