El responsable del despacho de la Dirección General de Parques y Vida Silvestre, Alfonso Martínez, informó que uno de los problemas más graves para la salud de los osos, es que se están alimentado de los desperdicios que encuentran en la basura y debido a que no es separada la comida, se comen el plástico y otros residuos peligrosos.
En el excremento de los osos que han sido capturados y trasladados a su hábitat natural lejos de la zona metropolitana, se han encontrado desechos de plástico, señala Martínez.
“Lamentablemente hemos detectados pedazos de plástico y bolsas que tenían en sus intestinos y eso los conlleva a una muerte a los animales.
“Esto sucede por la ingesta de la basura porque algunas bolsas de plástico conservan el sabor del alimento y así se lo comen, lamentablemente se pudiera estar condenando a la muerte a los osos”, comentó el especialista.
Martínez invitó a la población para que tengan un mejor control al momento de tirar sus desechos.
Una de las recomendaciones es poner candados a los botes de basura y tener contenedores más seguros en donde los osos no puedan ingresar.
Durante agosto, se reportaron 12 avistamientos de osos que bajaron en busca de comida a colonias aledañas a los cerros.
En la zona sur de Monterrey; San Agustín, en San Pedro, y en colonias aledañas a la Cola de Caballo, en Santiago, fueron los lugares más recurrentes en donde se observó a esta especie nativa de Nuevo León.
En la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UANL se han reportado durante el mes en cinco ocasiones un oso se paseó por los pasillos del campus, lo que fue aprovechado por los estudiantes para tomar fotos y videos.
Alfonso Martínez, explicó que por la temporada de calor se presentaron más avistamientos de lo normal y no descartó que se sigan presentando porque el Estado es tierra de osos.
“Si una persona ve un oso, la primera recomendación es alejarse, no alimentarlos porque es condenarse a muerte ya que se acostumbran al alimento fácil y se elimina su instinto silvestre.
“Toda la fauna silvestre conlleva a un riesgo, en este caso los osos que vemos en Mederos son los que se han acostumbrado a la presencia humana por el alimento que les ofrecen, pero si el animal no es intimidado o atacado no hay ningún problema”, explicó.
Redacción/El Nacional