Redacción/El Nacional
Después de 67 horas, sepultado bajo las ruinas de un deslave ocurrido en el sur de China un hombre fue salvado por cuadrillas de rescate de Shenzhen, ciudad donde ocurrió el accidente.
Las cuadrillas de rescate sacaron a Tian Zeming, un obrero de 21 años que había quedado sepultado tras el derrumbe pero que quedo protegido por una puerta que le aplastó el pie pero le abrió suficiente espacio para respirar.
Con voz débil Tian le dijo a los rescatistas que otra persona había quedado enterrada con él, pero al encontrarla ya había fallecido.
Más de 70 personas siguen desaparecidas al colapsar una montaña de desechos y materiales de construcción al mediodía del domingo.
En Shenzhen se fabrican todo tipo de productos para exportación mundial como por ejemplo teléfonos celulares y automóviles, y es un imán para gente de toda China que viene en busca de empleo.
El vicealcalde Zhang Hu dijo en conferencia de prensa se han hallado cuatro cadáveres. Añadió que aunque ya han pasado 72 horas, los esfuerzos de rescate continuarán con cinco mil rescatistas.
La televisora estatal CCTV reportó que Tian fue operado por fracturas en la mano y en el pie, que había quedado aplastado por la puerta. Se reportó que el joven trataba de salir de su habitación cuando el edificio se le derrumbó encima, y que la puerta le protegió y le dio espacio para sobrevivir.
El director del hospital Wang Guangming dijo que Tian está en condición estable pero sumamente débil, deshidratado y con múltiples heridas y fracturas, según la agencia oficial de noticias Xinhua.
Xinhua reportó que los rescatistas ubicaron a Tian bajo los escombros a eso de las 3:30 de la mañana y lo sacaron tres horas después.