Daniel Ramírez es un joven de 25 años que atrajo la atención internacional cuando fue cancelado por el gobierno en su estatus en el programa de Acción Digerida para los Allegados en la Infancia( DACA por sus siglas en inglés) y fue puesto en proceso de deportación.
Ante esto los abogados de Ramírez, pidieron al juez que impida el gobierno rescindir las protecciones concedidas a su cliente o que dejen de afirmar que han estado involucradas con las pandillas.
A pesar de ello, los abogados del gobierno insistieron en que las medidas podían ser prematuras o injustificadas.
El joven tiene hasta el 7 de mayo para contestar al último intento del gobierno de revocar su inscripción en el DACA, y la decisión definitiva será dada a conocer un poco después.
Fue la semana pasada cuando fue detenido por agente en su casa en Seattle junto a su padre. Los responsables de la captura aseguraron que el joven tenía el tatuaje de una pandilla que se llamaba como su ciudad de origen en México y que reconoció tener vínculos con pandillas, lo cual el niega.
Anteriormente aprobó 3 veces las revisiones de antecedentes para acceder a DACA, el gobierno no presentó pruebas que prpbaran su implicación con pandillas, en una audiencia en una corte de inmigración, un abogado del gobierno aseguró no tener indicio de que el mexicano representara un peligro para la seguridad pública.