Redacción/El Nacional
El coordinador de Salud Pública de la delegación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en Sonora, Daniel Pérez Medina reveló que las formulas lácteas pueden llegar a generar trastornos digestivos a los bebés como intolerancia a la lactosa, distención, dolor abdominal, gases, entre otros.
Pérez Medina, advirtió a los padres que alimentar a los hijos en sus primeros seis meses de vida con formulas lácteas modificadas y adicionadas con ciertos nutrientes no es la mejor opción.
“Existe una gran cantidad de productos, marcas y líneas de leche como sustituto, pero al final esto resulta más caro, tanto por su costo al adquirirlas, como en las consecuencias que le puede traer al recién nacido, que van desde reacciones alérgicas, hasta ciertas alteraciones en su sistema inmune”, explicó.
Destacó la importancia de la leche materna, que además de ser alimento perfecto para el recién nacido, proporciona aminoácidos especiales que fortalecerán sus defensas, ya que el problema de las fórmulas modificadas no es su consumo, sino la absorción de nutrientes por parte del organismo del lactante.
“La lactancia materna trae consigo beneficios a corto y largo plazo, genera un sello metabólico al proporcionarla en los primeros minutos de vida del bebé, lo cual evita que haya otras sustancias como las fórmulas láctea, que generen alergias o alteraciones asociadas a la inmadurez de su sistema inmune”, agregó Pérez Medina.
Por último, el coordinador aseguró que la formula láctea debe ser exclusiva en los primeros seis meses de vida y posteriormente complementaria hasta los dos años, ya que en esta etapa del desarrollo maduran los sistemas digestivo y respiratorio.