José Luis Marroquín/El Nacional
Con la finalidad de que la Secretaría de Desarrollo Sustentable preste atención a la problemática de contaminación que tienen los ríos Pesquería y Ramos, el diputado del Partido Verde Ecologista de México, Felipe de Jesús Hernández Marroquín presentó un exhorto para implementar medidas y rehabilitar dichas zonas.
Asimismo el legislador anunció la elaboración de un Programa Integral de Protección del Medio Ambiente, que establece sanciones así como planes de prevención.
De igual manera Hernández Marroquín exhortó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Comisión Nacional del Agua y a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, así como a la Secretaría de Desarrollo Sustentable del Estado de Nuevo León, y a los Municipios de García, Monterrey, Escobedo, Apodaca y Pesquería, para que conformen un equipo de trabajo al que se destinen recursos para elaborar un programa y una campaña que proteja al río Pesquería, al tiempo que sancione a quienes contaminan indiscriminadamente las aguas de este río.
“En las condiciones actuales, ese río es un verdadero foco de contaminación y un peligro para la salud. Actualmente enfrentamos en México la presencia de graves enfermedades como el dengue y el zika. La situación en que se encuentra el río Pesquería lo vuelve el lugar ideal para que los insectos portadores de estas enfermedades se reproduzcan de manera fácil y numerosa, con las consecuencias que pueden ser verdaderamente lamentable”, dijo el diputado.
Señaló que el río alimenta pozos de agua que utiliza la gente en diferentes partes del Estado por el que el afluente cruza. Además se utiliza para regar sembradíos de diferentes productos agrícolas.
“Las autoridades han hecho poco por enfrentar decididamente el problema. El Delegado de la Profepa se deslinda del problema señalando que no es de su competencia. El Poder Ejecutivo critica lo que se ha hecho anteriormente y dice que se reunirá con autoridades federales para encontrar una solución. Existen campañas para enfrentar el zika y el dengue, pero no atienden el foco de contaminación que significa el río.
“Por su lado, los municipios involucrados carecen de recursos económicos para enfrentar el problema. Lo cierto es que el problema se agudiza y no hay acción gubernamental de ningún nivel que dé una respuesta adecuada al problema”, comentó Hernández Marroquín.