Redacción/ El Nacional


Ante los recientes motines en el penal de Cadereyta, el vocero de Seguridad, Aldo Fasci, aceptó las fallas dentro del Penal de Cadereyta que derivaron en estos disturbios vividos el pasado lunes y martes.

“Es una tontería lo que te voy a decir, pero el control tiene que ser momento a momento, 364 días se tiene el control, dos días falló, con media hora que falle tienes”, dijo el funcionario.

El martes, tras un recuento de los daños del motín del lunes, había asegurado que la situación se encontraba bajo control, sin embargo, horas más tarde se desató nuevamente la violencia, ahora con un saldo más grave que el anterior, con 4 muertos y 21 heridos.

“Yo siempre dije que estábamos en alerta, les dije que momento a momento se tiene que renovar el control, estamos en alerta máxima de todo el sistema penitenciario”, reiteró el funcionario.

Asimismo Fasci aseguró, que el Grupo de Coordinación en Seguridad que encabeza el gobernador Jaime Rodríguez, se encuentra analizando los factores que llevaron a los actos de violencia, con el fin de tomar una decisión.

En cuanto si sería destituido algún alto mando del sistema penitenciario o de seguridad dijo que “se va a ir quien se tenga que ir y se va a quedar quien se tenga que quedar. Se va a construir lo que se tenga que construir”.

Aunque subrayó que “no hay de donde conseguir la gente necesaria”, si es que se decide remover a alguno de su cargo.

Fasci indicó que después de los motines, en el Penal de Cadereyta hay más de 300 espacios que resultaron dañados, los cuales serán sometidos a reparación.

Además, agregó que quienes murieron calcinados no presentaron muestras de agresión. “Estaban drogados, estaban tomando medicamentos para el área psiquiátrica como si fuera refresco”, dijo.

Agregó también desconocer cómo es que los reos prendieron fuego a la farmacia.