La falta de actividad sexual puede repercutir gravemente en tu salud, pues de acuerdo a distintos estudios se ha comprobado que el tener relaciones sexuales continuas te pueden llevar a tener cambios positivos en tu salud.

Y es que tener relaciones sexuales hace que liberes endorfinas que impactan en los centros de placer y generan dopaminas, las cuales tienen la capacidad de mitigar el dolor y el estrés, lo que, a su vez, dará una sensación de felicidad y relajación.

De igual manera, la actividad sexual reduce los niveles de cortisol, la hormona responsable del estrés.

Es por ello que la abstinencia sexual afecta tu mente y el cuerpo, pues diversos estudios revelan que no hacer el amor causa una baja autoestima, mal humor, y, en algunos casos, depresión.

Algunas personas que se abstienen de tener relaciones sexuales, comienzan a sentirse más lentas, con menos vitalidad, y hambre de tenerlas

Las mujeres pueden tener, incluso, otros problemas, peores calambres menstruales, menos lubricación (sobre todo a medida que envejecen y reducen hormonas como el estrógeno), o debilitamiento de las paredes vaginales.

Aunque no lo creas el sexo favorece a la salud cardiovascular, ya que, inconscientemente se realiza ejercicio aeróbico durante su práctica, que ayuda a bajar la presión arterial.

Además, las mujeres cuando tienen orgasmos, estimulan la liberación de la hormona oxitocina.

Redacción/El Nacional