Redacción/El Nacional
Los refrescos han tomado popularidad entre los mexicanos durante los últimos años pero, el consumo de este líquido no es la mejor manera para hidratarse y quitar la sed.
El nutricionista Marco Taboada explicó que el consumo de bebidas gaseosas provoca una deshidratación severa, por lo que podríamos terminar en el hospital.
“Cuando uno camina, corre, o juega, pierde agua y electrolitos por medio de la sudoración, y en verano aún más. Para evitar la deshidratación es importante consumir agua, frutas, verduras y refrescos naturales, siempre con agua hervida para evitar problemas estomacales”, dijo Taboada.
Además, es importante recordar que los refrescos brindan una gran cantidad de calorías por el alto contenido de azúcar, lo que podría causar sobrepeso.
Por otro lado, estos productos también contienen cafeína, la que actúa como diurético y genera pérdida de agua en el cuerpo y cuentan con altos niveles de ácido fosfórico que pueden causar descalcificación y cálculos renales.