Monterrey fue testigo de una noche mágica y sinfónica el pasado 25 de Noviembre con la icónica presentación de Mijares en el Pabellón M. El cantante, acompañado de una majestuosa orquesta bajo la dirección del Maestro Alberto Moreno, ofreció una experiencia musical única que recorrió toda su discografía desde mediados de los 80’s que saltó a la fama.

La velada comenzó en punto de las  9:35 de la noche con la orquesta interpretando una  obertura consistente en un Medley de éxitos que inició con “Corazón Salvaje“, “No se murió el amor“, “Para amarnos más“, “Bella” y “Soldado del Amor“, temas en los que la orquesta llenaba de armonías y acordes que profundizaban la emotividad de la canción.

Al terminar este medley, Mijares, vestido con elegancia y portando lentes oscuros, encantó el escenario desde el primer momento, haciendo su voz resonar en cada rincón del Pabellon M para interpretar “No se murió el amor

Mijares

Los acordes de “Bella” resonaron como un susurro melódico, transportando a la audiencia a un viaje lleno de nostalgia y romance. Fue un tributo apasionado a sus raíces musicales que conquistó los corazones de los presentes.

El punto álgido llegó con “Soldado del Amor“, donde Mijares desató todo su poder vocal, llevando a la audiencia a un éxtasis musical. Los arreglos de la orquesta y la voz inconfundible del cantante se entrelazaron, creando un momento inolvidable.

El repertorio no se limitó a los éxitos conocidos; también hubo espacio para sorpresas como “Si Me Tenías“, que resonó con la emotividad característica de Mijares. El público se sumió en la intimidad de la balada, conectando con la esencia pura de la canción.

Mijares

Y, por supuesto, la velada no podía concluir sin el clásico “Uno Entre Mil“. El ambiente se llenó de emoción y la audiencia se unió en un coro masivo, demostrando que esta canción sigue siendo un himno del amor y la pasión.

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Mijares Sinfónico no solo fue un concierto; fue un viaje a través de décadas de éxitos, una celebración de la música que ha dejado una marca imborrable en la historia del pop en español. La noche fue un tributo a la grandeza de Mijares, un artista que sigue reinventándose y emocionando con su inigualable talento.

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