Un operativo reveló que al menos dos terceras partes de 150 empresas factureras fueron utilizadas para blanqueo de recursos y el resto llevaron a cabo transacciones sin dinero para evadir impuestos, así lo informó el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
“Esto es una muestra de una perversidad a partir de que el fisco no fiscalizó en el pasado y que llegó hasta el crimen organizado en el ámbito nacional e internacional, por el movimiento de los flujos de dinero“, indicó Margarita Ríos-Farjat, titular del SAT.
“Se tienen diez mil empresas con facturas apócrifas, con casi nueve millones de facturas falsas que suman 1.6 billones pesos, lo que significa una evasión de 354 mil millones de pesos, equivalente a 1.4 del PIB“, añadió Margarita.
Ríos-Farjat detalló que el total de empresas que emitió facturas falsas se multiplicó por 21 en el período de 2014 a 2018.
La titular de SAT aseguró y refrendó su compromiso para combatir el contrabando, realizar una planeación fiscal agresiva y detectar operaciones simuladas.