Luego de amenazar a empleados y comensales de un restaurante, por el simple hecho de estar comunicándose en español, Aaron Schlossberg, fue sorprendido por medios de comunicación y además despedido de su empleo.
Reporteros lo abordaron en la calle, pero él sólo se negó a responder preguntas hasta que logró abordar un taxi.
El congresista Adriano Espaillat contactó a la Corte Disciplinaria de la Barra de Abogados de Nueva York para que investiguen a Schlossberg, y en su caso, revocarle su licencia de abogado.
Hayim Grant, presidente de la compañía inmobiliaria que administra el edificio donde Schlossberg tenía su firma, confirmó que el abogado fue ‘invitado a retirarse’ ayer.
El directivo afirmó que las acciones de Aaron no corresponden con la filosofía de la compañía.
Schlossberg, es miembro del partido republicano y quien donó 500 dólares a la campaña de Trump en 2016, se unió a la barra de abogados de Nueva York en 2003.