Redacción/El Nacional
Practicar sexo dos veces por semana reduce las posibilidades de padecer un infarto.
Es un tópico, un lugar común, pensar que el sexo es enemigo de un corazón que ya acumula achaques. Pero nada tiene que ver con la verdad.
Al contrario, practicar sexo de manera regular y tener orgasmos ayuda al mejor funcionamiento del corazón. La ciencia acaba de mostrar que los pacientes cardíacos que tienen sexo dos veces por semana tienen hasta un 50% menos de probabilidades de sufrir un infarto frente a aquellos que lo hacen una vez al mes.
Así lo señala una reciente investigación publicada en The American Journal of Cardiology. El vicesecretario de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y miembro de la Fundación Española del Corazón (FEC), Ignacio Fernández-Lozano, se hace eco de ese estudio y apunta a los beneficios del orgasmo.
Durante el orgasmo se liberan diversas hormonas como la adrenalina, las endorfinas o la oxitocina, en el caso de las mujeres, que “actúan en nuestro organismo como vasodilatadores permitiendo una mejor circulación de la sangre y evitando así la formación de coágulos”.
La Fundación Española del Corazón recuerda otros beneficios que el sexo aporta a la salud, como la quema de calorías, la reducción de estrés, la mejora del estado emocional, así como la prevención de enfermedades (durante el sexo se elevan los niveles de inmunoglobulina, lo que protege de infecciones y favorece una mayor resistencia a las enfermedades).
Y es que el sexo debe estar entre nuestros hábitos de vida saludables. La FEC recuerda la importancia de mantener hábitos de vida saludables: una dieta equilibrada, realizar actividad física de forma regular, no fumar y no abusar del alcohol, para prevenir problemas cardíacos.
“Entre estos buenos hábitos de vida se encuentra, también, la práctica de sexo”, aseguran los expertos. Para aquellos pacientes que hayan tenido una enfermedad cardiovascular “es importante destacar que pueden mantener una vida sexual normal”, siempre que estén estables y mantengan la medicación prescrita y los controles periódicos.
Desde la FEC animan a todos los pacientes cardíacos a resolver sus dudas sobre sexo con su cardiólogo.