Redacción/El Nacional
En un comunicado la Fiscalía de la ciudad siciliana de Catania, declaró que elementos de Guardia de Finanzas y la Policía de Estado aprendieron a los traficantes de personas, acusados de favorecer la inmigración ilegal y homicidio de los 52 emigrantes, que ocurrió en el interior de la bodega de un barco rescatado este martes frente a las costas de Libia.
La Fiscalía informó que los testigos interrogados confirmaron que el marroquí Harboob Ayooubé era el capitán de la barcaza, mientras los otros detenidos se ocupaban de la distribución del agua, de la disposición de los migrantes y del cumplimiento del orden a bordo con el uso de violencia física.
Entre los acusados se encontraba un menor de edad quien fue transferido a un centro de acogida de Sicilia.
Por otro lado, los supervivientes han narrado la mala experiencia que vivieron a bordo del barco
“Nos obligaban a quedarnos ahí abajo en la bodega a la fuerza y amenazándonos con armas. No nos podíamos mover o de lo contrario nos habrían matado. No había aire y en pocas horas más de 50 personas murieron, fue horrible”, mencionó uno de ellos.
“Salimos de Libia con tantas esperanzas, pero no imaginábamos que en la bodega harían entrar a más de 200 personas, no podíamos movernos ni respirar. Mi hermano pidió ayuda pero no lo escucharon. Murió a mi lado, sin oxígeno. Ha sido terrible”, expresó.
Los migrantes que sobrevivieron, han sido transportados por la Siem Pilot quien se encargo de asignarles centros de acogida.
El fiscal Michelangelo Patane informó que entre ellos había 116 marroquíes que no reunían los requisitos para ser considerados refugiados, por lo que en su contra fue emitida una orden de repatriación inmediata.