Redacción/ El Nacional
Anuncia Rusia la destrucción de su última partida de armas químicas en una ceremonia a la que asistió una delegación de la Organización Internacional para la Prohibición de las Armas Químicas.
“Se puede decir sin alardear que es realmente un acontecimiento histórico, teniendo en cuenta los arsenales de armas químicas que heredamos de los tiempos soviéticos, con los que se habría podido destruir varias veces toda la vida de la Tierra”.
Así lo informó el presidente ruso, Vladímir Putin, en un vídeo conferencia con la planta Kizner, en la región rusa de Udmurtia y posteriormente fue confirmado por el director general de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, Ahmet Üzümcü.
Tras la destrucción total de las 39,867 toneladas métricas, Üzümcü, felicitó al país y a los expertos que participaron en las labores por su “profesionalidad y educación”, ya que consideró que este hecho supone “un hito importante en el logro de los objetivos de la Convención sobre las Armas Químicas”.
Ante este hecho, todos los Estados parte de la OPAQ se comprometieron en ese acuerdo a destruir tanto los arsenales de armas químicas que posean como las instalaciones que las hayan producido, así como las armas químicas que hayan abandonado en el territorio de otros países firmantes.
Por su parte, Putin subrayó que Rusia fue uno de los primeros países en firmar la Convención sobre Armas Químicas, en vigor desde 1997, y subrayó el esfuerzo económico que ha costado llevar a cabo la destrucción de todos los arsenales.