Redacción/El Nacional

En diferentes escenas y galas hemos visto a Amanda Seyfried llevar el típico vestido de novia, de color blanco. Es por esto que la estrella, quien está embarazada de su prometido Thomas Sadoski, asegura que no quiere ser el centro de atención en su boda real.

“Voy a premieres arreglada todo el tiempo. Fui a la gala del Met el año pasado en un vestido de novia de Riccardo Tisci; he sido la novia billones de veces”, expresó la actriz a Vogue Australia.

Hasta el momento no se han dado detalles sobre cuál color elegirá para su enlace matrimonial.