Redacción/El Nacional

Una ola de protestas se ha desatado luego de que se derribará una iglesia en Alemania para ampliar una mina de carbón. La destrucción de la iglesia de Immerath, en el oeste del país siendo la ultima etapa del traslado de miles de personas para crear una inmensa mina de carbón a cielo abierto.

El principal objetivo es permitir que la compañía energética alemana RWE propietaria del parque de centrales de carbón más grande de Europa, pueda extraer más ignito de la planta cercana de Garzweiler.

“Los que destruyen la cultura destruyen también a los seres humanos”, denunciaron en una pancarta los militantes de Greenpeace, poco antes de que las excavadoras empezaran a erribar las dos torres y la nave de la iglesia apodada “La Catedral”.