Como parte del tratado bilateral firmado entre Estados Unidos y México, entregaron a nuestro país a 47 personas para el traslado de delincuentes condenados, mientras tanto el Gobierno mexicano dejó en manos estadounidenses a cuatro de sus connacionales.

Los reportes de la Procuraduría General de la República indican que  entre los sentenciados regresados a territorio nacional hay una mujer, que fue encontrada penalmente responsable de delitos contra la salud; dos sentenciados por lavado de dinero y otros dos por posesión de arma de fuego.

En cumplimiento a las normas constitucionales y al tratado bilateral de la materia, los connacionales fueron trasladados a un centro penitenciario de México con el objetivo de obtener su reinserción social, cercana a su núcleo familiar y en un ambiente que comprenda valores de nuestra sociedad, tradiciones e idioma.

Los traslados se realizaron en coordinación con el Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social de la Secretaría de Gobernación.

El traslado internacional de un sentenciado, busca que con el consentimiento expreso del recluso, como requisito indispensable, éste sea trasladado a su país de origen en cumplimiento de un beneficio y un derecho humano protegido y salvaguardado por nuestra Carta Magna.

Redacción/ El Nacional