Joaquín “El Chapo” Guzmán, deberá permanecer en encarcelamiento solitario en una cárcel de la ciudad de Nueva York, para así evitar que trate de dirigir su organización delictiva tras las rejas, determinó un juez ayer.
En una decisión por escrito, el juez federal del distrito Brian Cogan rechazó la petición de los abogados de Guzmán de que se le permitiera al acusado salir del ala de máxima seguridad de una cárcel en Manhattan, para poder convivir con la población general de reos y recibir visitas.
A lo que el juez contestó que “para garantizar que el acusado no pueda coordinar una fuga de prisión, dirigir actos de violencia contra cooperadores ni dirigir ningún aspecto de las actividades del cártel de Sinaloa” deberá permanecer en confinamiento. Accedió a permitir que Guzmán se comunique con su esposa, pero sólo mediante cartas que deberán ser examinadas por agentes federales.
Los abogados defensores, Michelle Gelernt y Michael Schneider dijeron por medio de un comunicado que la decisión de no permitirle visitas era “devastadora” tanto para Guzmán como para su esposa.
“Seguimos creyendo que las condiciones de la detención del señor Guzmán, incluyendo la retención en confinamiento solitario, son indefendibles, especialmente por todo el tiempo que tomará llevar este caso a juicio”, indicaron.
Guzmán, de 59 años, fue extraditado a los Estados Unidos en enero y se declaró inocente de los cargos de encabezar una multimillonaria organización de tráfico de drogas responsable de asesinatos y secuestros.
Desde entonces, el capo mexicano ha estado en confinamiento hasta por 23 horas el día en una celda de seis por 3.7 metros en una unidad en que han estado detenidos otros reos de alto riesgo como el jefe de la familia mafiosa Gambino, John Gotti, y varios exaliados de Osama bin Laden.