Redacción/El Nacional
Cuba lanzó 35 puntos de acceso a Wi-Fi a lo largo de su territorio, ofreciendo un acceso sin precedentes a internet, en un país donde hasta ahora solo una minoría privilegiada tenía acceso a la red.
Antes de la apertura de la red inalámbrica, la conexión de banda ancha estaba limitada en su mayoría a salas de navegación estatales y hoteles costosos.
“Era hora de que conectáramos a los cubanos. Todo el mundo tiene derecho a Internet”, dijo Alejandro Costa, que utilizó la red Wi-Fi el jueves.
Para conectarse a la red, los cubanos necesitan una cuenta de Etecsa, la empresa estatal de telecomunicaciones.
Ya sea debido a la falta de inversión o por preocupaciones sobre el flujo de información en un país comunista que monopoliza los medios de comunicación, Cuba se ha quedado atrás en este sector. Sólo 3,4 por ciento de los hogares en Cuba tiene acceso a Internet o intranet, según una agencia de la ONU.
Un funcionario de Etecsa que negó a identificarse dijo que los 35 puntos de acceso funcionaban desde el lunes.
“Históricamente, Cuba ha tenido lo que es probablemente el peor acceso a Internet en este hemisferio. Es evidente que el Gobierno cubano ha decidido que el acceso amplio a Internet es esencial para una economía del siglo 21”, destacó William LeoGrande, profesor de la American University.
“Las salas de Internet y ahora la red inalámbrica demuestran que el Gobierno cubano es serio en sus planes de expansión de acceso a Internet”.
El Gobierno cubano también recortó los precios de 4,50 a 2 dólares por hora, lo que sigue siendo un precio exorbitante para los cubanos, que por lo general ganan un salario mensual de unos 20 dólares.
Muchos cubanos relacionan este nuevo avance con el acercamiento reciente entre Estados Unidos y Cuba, que acordaron reabrir embajadas y restaurar las relaciones diplomáticas para el 20 de julio.
En enero, el presidente estadounidense Barack Obama relajó el bloqueo económico contra Cuba respecto a las telecomunicaciones, con la esperanza de promover el desarrollo de Internet en Cuba.
Para Fidel Croswell, un taxista de 50 de La Habana, la nueva red Wi-Fi significa un fin a las largas filas en las salas de Internet estatales.
“Pero la solución es Wi-Fi en la casa, donde estás cómodo y puedes estar sin camisa y en chancletas”.