Redacción/El Nacional
En la actualidad Facebook es como una carta de presentación, conoce tus gustos, tu edad y hasta con quien te relacionas, sin embargo, esto pone en riesgo tu seguridad; por ello, conoce las cosas que deberías de eliminar ahora mismo.
Tu nombre completo:
Hay quien tiende a poner su nombre y dos apellidos, tal cual aparece en su carné de identidad. O aún peor: tal y como sale en el currículum vitae. Si estás buscando trabajo, ten por asegurado que el reclutador te buscará en internet. Y puede que lo que vea no le guste. No tiene por qué ser malo necesariamente, pero quizás lo que perciba a través de tus fotos o tus comentarios no encaje con el perfil que está buscando.
Tu fecha de nacimiento:
Los informes que advierten de la poca imaginación que tenemos a la hora de poner contraseñas ya nos advierten de que tenemos que dejar de poner el clásico 0000 como código PIN o el 123456 como contraseña del Facebook. El siguiente password más utilizado es la fecha de nacimiento, o una combinación entre nuestro año y nuestro nombre.
Esto no solo lo saben las empresas de seguridad informática, también lo saben los piratas informáticos. Así que si les pones en bandeja el dato de tu aniversario, les estarás poniendo muy fácil el acceso a tu información.
Tu número de teléfono:
Las aplicaciones de las redes sociales, con el pretexto de ofrecerte un mejor servicio y una mayor seguridad, te piden que ingreses el número de teléfono. Y en ocasiones también dejan un espacio en el perfil para ingresarlo y hacerlo visible al público. No lo hagas. Es probable que tu teléfono vaya a parar a una –o más de una- base de datos. También te expones a que te contacte gente sin permiso. Y entre esta gente, puede haber alguno que otro más pesado de la cuenta.
Desconocidos:
Si te agrega un desconocido, no hagas clic en “Aceptar” sin más. Antes, echa un vistazo a su perfil. ¿Es una cuenta recién creada? ¿Hay actividad en su tablón que haga pensar que realmente ha habido una persona utilizando esa cuenta un tiempo? Si no, quizás estés antes una cuenta falsa de alguien que quiere acceder a las fotos que solo tienes abiertas a amigos. Lo que los anglosajones llaman un “stalker” en toda regla. Sé desconfiado como regla general.
Fotos de tus hijos o menores:
La paternidad es un motivo de orgullo total. Y a veces es complicado contener esta felicidad. El cuerpo te pide proclamarla a los cuatro vientos.
Hay muchos padres primerizos que colapsan sus cuentas con vídeos y fotos de su retoño. Muchos cuestionan este comportamiento, porque el adulto está decidiendo publicar la imagen del niño sin tener en cuenta su derecho a la intimidad. Además, no hay nada más vulnerable que un niño, y aunque no lo creas, una vez subes su foto a internet esa imagen queda a la disposición de un montón de gente.
Que irás de vacaciones:
Aunque sabemos que es súper emocionante ir de vacaciones y te mueres por compartirlo con tus amigos avisar en las redes sociales que te irás de vacaciones no es la mejor idea pues quizá cuando vuelvas a casa la encuentres desvalijada.
Fotos de boletos:
Es arriesgado porque a través del código de barras o el código QR podrían acceder a la información de tu reserva, y obtener datos privados.