Corea del Norte ha dinamitado este martes tramos clave de las carreteras de Gyeongui y Donghae que conectan con Corea del Sur, cumpliendo su amenaza de cortar todos los vínculos de transporte con el país vecino. El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur (JCS) confirmó la destrucción alrededor del mediodía en la Línea de Demarcación Militar, en un momento de creciente tensión en la península.

La decisión de Pionyang llega tras la reciente enmienda constitucional que redefine las fronteras nacionales, ordenada por Kim Jong-un, y se produce en respuesta a las maniobras militares conjuntas entre Corea del Sur y Estados Unidos. Además, el régimen ha acusado a Seúl de enviar drones con propaganda y ha advertido de represalias si persisten los incidentes.

El Norte también ha anunciado la construcción de “fuertes estructuras de defensa” en la frontera, declarando al Sur como su principal enemigo. Estos hechos refuerzan la alerta en la región y evidencian el deterioro de las relaciones bilaterales, especialmente en las rutas estratégicas que conectan las dos Coreas.

Redacción/El Nacional