Cada 28 de diciembre se celebra el Día de los Santos Inocentes, fecha en la que las personas acostumbran a hacer bromas a sus seres queridos. Sin embargo este día fue estipulado para conmemorar a los niños asesinados bajo las órdenes de Herodes.

En la Biblia católica se menciona que magos provenientes de Oriente llegaron a Jerusalén guiados por la luz de una estrella, buscando al Mesías que debía nacer en Belén, pero en su camino tuvieron una entrevista con Herodes, quien al escuchar que los magos buscaban al Mesías, rey de los judíos, tuvo temor de que eso lo amenazara como gobernante e intentó saber dónde se hallaba.

Como es conocido, este Mesías, era el niño Dios, hijo de la virgen María, quien nacería en el pesebre del establo hasta donde los magos serían conducidos por la estrella de Belén y ahí presentarían obsequios al recién nacido Jesús de Nazaret.

Pero Herodes al no conseguir ubicar al niño Dios enfureció y mandó asesinar a todos los niños menores de dos años que había en Belén.

Y aunque en este texto sagrado para los católicos no se habla acerca de la costumbre de hacer bromas ese día en recuerdo de aquellos niños, en México se suelen hacer bromas o pedir prestado a los incautos bajo la frase conocida de “Inocente palomita que te dejaste engañar” ya que, el 28 de diciembre, el dinero prestado no volverá a manos de quienes inocentemente fueron engañados para prestarlo, o aquella en donde uno se encuentra dinero en la calle e intenta recogerlo sin éxito.

Este día se recuerda no solo a esos niños inocentes asesinados, sino a todos los inocentes que han sido perseguidos y que han perdido la vida.

Redacción/ El Nacional