Mayra Herrera/El Nacional
Desde el descubrimiento del potencial de regeneración de las células madre, científicos no dejan de investigar la manera de aprovecharlas para tratar diferentes enfermedades.
A pesar de que el descubrimiento a marcado una nueva era para la ciencia , siguen diversos aspectos por entender.
“Cuando se encuentran productos o tratamientos que ofrecen células madre y peor aún, que dicen que las mezclan con células de animales, plasma o plaquetas, son falsos, notienen ningún rigor científico”, aclaró hematólogo David Gómez.
Se requiere de un medio adecuado y de experiencia medica para trabajar con células madre. Para conservarlas es adecuado mantenerlas en congelación a temperaturas de – 196 grados centígrados, de lo contrario morirán.
El poder que tienen de dividirse sin límites las transforma en un sistema de reconstrucción del cuerpo que ayuda a reponer células dañadas.
Existen dos tipos principales “células madre embrionarias” que existen en las primeras fases del desarrollo embrionario, que son capaces de producir cualquier tipo de células en el cuerpo, y “células madre adultas” que son aquellas que tienen la capacidad para crear copias de sí mismas para reconstruir órganos y tejidos, se encuentran en la médula ósea y en el cordón umbilical del bebé.
Las células madre al igual pueden encontrarse en otros tejidos como la sangre y la grasa corporal.
“Cualquier persona, fuera de los institutos de salud, que diga que prepara vacunas o cremas a base de células madre está mintiendo” aclara el jefe del Servicio de Hematología del Hospital Universitario.
