Un grupo de investigadores cubanos descubrieron que el veneno del escorpión azul, cuyo nombre científico es Rhopalurus junceus, parece tener propiedades antiinflamatorias y analgésicas, y puede retrasar el crecimiento tumoral en algunos pacientes con cáncer.

Los oncólogos en el extranjero dicen que se necesita más investigación para poder respaldar adecuadamente tal afirmación, pero lo cierto es que la firma farmacéutica cubana Labiofam ha estado usando veneno de escorpión desde 2011 para fabricar la medicina homeopática Vidatox.

El remedio ha demostrado ser popular y las ventas han experimentado un crecimiento del 10 por ciento anual. Vidatox ya vende en unos 15 países de todo el mundo y actualmente está en conversaciones con China para vender en este país.

Un claro ejemplo de esta investigación es que Pepe Casanas, un cubano de 78 años, ha cazado escorpiones desde hace 10 años  para que le picaran. Y es que, según asegura Pepe, el veneno del animal le protege de sus dolores reumáticos.

Redacción/El Nacional