Dalia Manriquez/El Nacional


T2“Los Jefes de Jefes” llegaron con sus “garras” bien afiladas anoche al Domo Care, pues en el momento en que Jorge, Eduardo, Óscar, Luis y Hernán se posicionaron al centro del redondel, causaron una fuerte ovación del público que se dio cita en el lugar.

Al filo de las 23:50 horas Los Tigres del Norte iniciaron la primera de sus tres presentaciones en el recinto, pues con una producción de pantallas LED que rodeaban el redondel y con la batería en un segundo nivel al centro, arrancaron con los temas “La Banda del Carro Rojo” y “Pacas de a Kilo”.

Los 5 mil 700 regios (cifra oficial) que asistieron al concierto, comenzaron a aplaudir aún más cuando sonaron los éxitos “No Pude Enamorarme Más” y “Ni Parientes Somos”.

Uno de los puntos a favor de la agrupación, es la mezcla de sencillez y humildad, pues Jorge, Hernán, Eduardo y Luis todo el tiempo accedían a las fotografías con sus seguidores, quienes se acercaban a las orillas del redondel.

Los Tigres del Norte todo el tiempo trataron de complacer a los regios, y para esto, dieron pie a las canciones “El Niño y La Boda”, “La Mesa del Rincón”, y sin duda alguna “Golpes en el Corazón”, mismo que ha sido ícono en la trayectoria musical del grupo.

“La siguiente melodía la vamos a dedicar para las jefas de jefas y todos los jefes de jefes”, dijo Jorge a sus seguidores para complacerlos con la canción “Jefe de Jefes”.

Las mujeres fueron el centro de atención cuando “Los Incansables” comenzaron a cantar el éxito de “La Manzanita”, y así provocar que las asistentes se pusieran de pie y comenzaran a bailar.

Con toda la energía que se sentía en el Domo, los regios siguieron cantando junto a la agrupación las canciones “Pedro y Pablo”, “Señor Locutor”, “Nos Estorbó la Ropa” y “La Tumba Falsa”.

Ya habían transcurrido tres horas de música “matona”, y Los Tigres del Norte como los asistentes, no querían que llegara a su fin.

“No sé si nos den permiso, tenemos tres horas cantando”, comentó Jorge.

Tras ello, el grupo continuó cantando las melodías que su mismo público les seguía pidiendo, tales como “América”, “Cariño Dónde Andarás” y el famoso corrido de “Laurita Garza”, y de esta mandera concluir el primer concierto a las 3:20 horas.

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