Erika williams/El Nacional
Los complejos por los cuales los varones consultan podrían resumirse en pocas palabras: baja autoestima y desinformación sexual. En muchos casos, su propia visión guarda relación con su capacidad o no para formar lazos amantes e íntimos. Tener una imagen corporal positiva es una parte importante de la autoestima, y sentirse bien con uno mismo es vital para establecer relaciones íntimas con otros.
La vergüenza por algún complejo físico (real o imaginario) puede interponerse bloqueando situaciones de cortejo, encuentros sexuales, la práctica de deportes (porque dificulta el hecho de desvestirse en un vestuario común) o la posibilidad de tener amigos/as por temor a que la relación progrese hacia la actividad sexual.
La sociedad, desde siempre, ha puesto en este órgano una sobrecarga de significados, que lo han transformado en una deidad cultural por excelencia. El supuesto “saber” popular lo hace aparecer, como la “llave maestra” del placer, tanto masculino como femenino.
Las mujeres desmienten lo cierto es que la mayoría de los hombres desconoce que para las mujeres el tamaño del pene no es verdaderamente importante, y que a la hora de elegir una pareja toman en cuenta otras características de los hombres: atractivo físico, seducción, simpatía, honestidad, intimidad, apoyo, comprensión y/o amor, y que perciba las necesidades sexuales y afectivas de ellas.