Redacción/El Nacional

Graham Ward tenía 60 años cuando fue diagnosticado con diabetes de tipo 2.

Ocurrió décadas después de estar comiendo y bebiendo demasiado, con mucho estrés y un trabajo sedentario: “Estaba a punto de explotar”, dijo Ward

En 2014, al menos 350 millones de personas en el mundo ya vivían con diabetes y en 2012 esta enfermedad le había causado la muerte a 1.5 millones de personas, una cifra que la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que aumentará en un 50 por ciento en esta década.

“La diabetes de tipo 2 es la más común y está asociada al peso y al estilo de vida”.

Por eso las autoridades sanitarias de Reino Unido hicieron una recomendación pública esta semana: les pidieron a las personas de mediana edad que caminaran más a menudo y rápidamente.

“Cuando alguien se pone frente a ti y te dice que eres tú el afectado, no hay dónde esconderse”.

Y Graham se valió de un contador de pasos para ponerlo en práctica. Y asegura que comenzar a usarlo “le salvó la vida”. Una investigación reciente en Inglaterra concluyó que un 41 por ciento de personas de entre 40 y 60 años no llega a caminar ni diez minutos diarios en todo un mes.

Cuando el médico le dijo que era diabético, Graham se dio cuenta de que necesitaba hacer algunos cambios en su vida. 

“Mi ropa se me había quedado pequeña, y empecé a escuchar cómo el sobrepeso podía afectar a mi vida y a mi salud en otros aspectos”, confiesa. La diabetes está vinculada a enfermedades cardíacas, accidentes cerebro vasculares y enfermedades renales, y puede reducir la esperanza de vida de quien la sufre.

Graham dice que en otras ocasiones había hecho la vista gorda. Pero con este diagnóstico, todo cambió.

Graham se compró un par de zapatillas nuevas que le ayudaron a aumentar de manera gradual sus caminatas diarias, hasta llegar a los 8 kilómetros.

“Comienzas a mejorar rápidamente cuando te das cuenta de que después de la primera o segunda vez no te quedas sin aliento de inmediato y de que puedes caminar más lejos de lo que pensabas”, dice Graham.