Redacción/ El Nacional
Cuando tienes una enfermedad de transmisión sexual (ETS), es indispensables que le cuentes a tu nueva pareja y que tomes medidas preventivas con respecto al sexo y prevenir un contagio a la pareja.
Sabemos que no es una confesión fácil de hacer, especialmente cuando hay tanta estigmatización y discriminación hacia las personas que las padecen, y puedes temerle al rechazo. Pero lo importante no es lo que piensen los demás, sino lo que pienses tú.
Si no quieres ser deshonesto ni poner en riesgo la salud de esa nueva persona que ha llegado a tu vida, actúa como indican tu corazón y tu conciencia.
Elige el momento adecuado, tranquilo, cuando estén de buen humor y tengan tiempo para sentarse a conversar del tema. Y sobre todo, no es recomendable que hables de esto justo cuando están en un momento de pasión.
Infórmate bien sobre tu ETS, los riesgos que puede correr tu pareja, y la forma de evitar que él o ella se contagien. Así estarás preparado para contestar cualquiera de sus preguntas.
Prepárate. Piensa cómo se lo vas a decir, qué palabras vas a usar. El tener una actitud segura y tranquila para decir sin muchos rodeos. Es importante no sólo contar el problema si no también su solución, así que incluye en tu conversación de cómo protegerlo de cualquier riesgo.
Dale tiempo. Es probable que tu pareja necesite reflexionar sobre el tema, dependiendo de los riesgos que pueda implicar para él o ella. Dale tiempo para pensar si lo pide, o para hablar si lo necesita, y responde todas sus preguntas con calma.
Nunca sabes cuál será la respuesta que obtendrás, por eso es importante que decidas hablar por tu propia convicción. Y si finalmente tu nueva pareja decide alejarse, no te desanimes ni te arrepientas por haber hablado, otros probablemente valorarán tu sinceridad y se quedarán. Y esas relaciones son las que valen la pena para ti a largo plazo.