En un comunicado de más de cien grupos civiles en conjunto con organizaciones religiosas, se insta a el jefe de estado Robert Mugabe, a dejar su cargo de manera pacifica, solicitando también al ejército restaurar el orden con rapidez y respetando la Constitución.
De momento, los Zimbabuenses de todo el país, se encuentran aprovechando el vacío de poder para disfrutar de libertades que no habían tenido en años y también para expresarse sin temor a represarías.
Por otro lado, distintos grupos humanitarios pidieron respeto a los derechos mientras se desarrollaba la situación.
La embajada de Estados Unidos en Zimbabue, por su parte, lanzó una advertencia a sus ciudadanos para que “limiten los movimientos innecesarios”, mientras que el gobierno británico solicitó a sus ciudadanos evitar aglomeraciones grandes de personas y manifestaciones.