La cadena de comida rápida KFC este lunes cerró más de 700 restaurantes en Reino Unido por falta de pollo debido a un programa de distribución de la empresa alemana DHL.
Desde hace días KFC tiene problemas con la empresa alemana DHL, con la que trabaja recientemente para la entrega de la materia prima.
“No queremos transigir sobre la calidad y por eso, en ausencia de entregas, algunos de nuestros restaurantes están cerrados y otros sólo proponen una parte del menú y en horarios reducidos”, explica KFC en un comunicado.
En otro comunicado DHL pidió disculpas y admitió tener problemas operacionales.