Cinco científicos rusos llevan alrededor de dos semanas atrapados en una estación meteorológica bajo el asedio de 10 osos polares en la isla de Troynoy, cerca del mar de Kara, en Rusia. Los mamíferos han demostrado resistencia, pues ni de día ni de noche han dejado de custodiar el lugar localizado en el Ártico.
“Desde el sábado una osa hembra ha estado durmiendo bajo la ventana de la estación” declaró a una agencia rusa el investigador Tass Vadim Plotnikov, quien se encuentra atrapado ahí.
Los científicos afirman que podrían usar la fuerza contra los animales, pero estos pertenecen a una especie protegida, por lo que no es posible usar ningún tipo de arma. Este acecho inició el pasado 31 de agosto, cuando una osa atacó a uno de los perros que custodiaban la estación y se lo comió.
Desde aquel momento, el entrevistado declaró la dificultad y el peligro que corre el equipo al intentar pisar el suelo de la isla para realizar cualquier observación. En tanto, el diario británico The Guardian señaló que entre los investigadores hay dos parejas casadas.