El pasado 23 de julio, murieron asfixiados y sofocados 10 inmigrantes que trataban de cruzar la frontera de Estados Unidos ilegalmente abordo de un remolque .
El día de hoy se realizó una audiencia ante el juez federal estadounidense Henry Bemporad, donde el conductor James Mathew Bradley de 61 años de edad, se declaró el culpable de transportar extranjeros indocumentados para obtener ganancias financieras, que lamentablemente tuvo un resultado letal.
Los inmigrantes que venían encerrados en el camión de carga murieron hacinados bajo un clima extremadamente caluroso.
En una audiencia que se realizó este lunes ante el juez federal estadounidense Henry Bemporad, el conductor de 61 años de edad se declaró culpable de un cargo de conspiración para transportar extranjeros con resultado en muerte, y un cargo de transporte de extranjeros con resultado la muerte de más de diez personas.
En la audiencia, Bradley también accedió a ceder al gobierno federal estadounidense la propiedad de su tráiler y de unos cinco mil 600 dólares en efectivo, además de una pistola calibre .38 recuperada en el interior del camión.
El chofer estará bajo custodia hasta que se dicte la sentencia programada para el próximo 22 de enero.