Agencias / El Nacional
El príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa Camilla marcaron hoy el inicio de las celebraciones del bicentenario de la histórica batalla de Waterloo, en esa localidad belga en donde Napoleón Bonaparte perdió su última batalla frente a las tropas del Duque de Wellington.
La pareja real británica en compañía de la princesa Astrid de Bélgica, asistieron a la inauguración del edificio de Hougoumont, en donde los aliados resistieron a las investidas de los hombres de Napoleón.
El edificio fue renovado por las autoridades belgas y británicas y convertido en un museo didáctico valorado en más de 2.5 millones de euros. Artesanos británicos se han encargado de reconstruir la puerta norte, cerrada durante la batalla por los soldados ingleses del duque de Wellington para impedir la entrada de los franceses.
Los descendentes del duque de Wellington, del mariscal Blücher y del Príncipe de Orange-Nassau, que lideraron la contra-ofensiva aliada, también se encontraron en el local para rendir tributo a los cerca de dos mil soldados que perdieron sus vidas en la ocasión.
Desde el martes la región de Waterloo vive inmersa en el pasado lejano, con vastas áreas tomadas por tiendas de campañas, hogueras y figurantes en trajes de antaño, reconstituyendo los campamentos militares de junio de 1815.
Las celebraciones del bicentenario se extenderán hasta el domingo y tendrán como puntos máximos el espectáculo inaugural de luces y música, “Infierno”, en la noche del jueves, además de dos reconstituciones de la batalla final, el viernes y el sábado. Se espera que los tres eventos reunan a un público de cerca de 200 mil personas.
NTX