Redacción/ El Nacional

En su tercera oportunidad de alzar la copa de la Concacaf, los Tigres no pudieron hacerlo y luego de la derrota la noche del miércoles frente a Pachuca arribaron este jueves por la mañana con un silencio a la ciudad de Monterrey.

Cabizbajos y muy tristes fue como los felinos llegaron al aeropuerto Mariano Escobedo en punto de las 11 de la mañana, en donde evitaron tomarse fotos con las personas que se acercaban a ellos.

El equipo viajó directamente hacia el estadio universitario pensando en el juego frente a los Xolos de Tijuana, actual líder de la competencia, donde en caso de perder estaría prácticamente diciendo adiós a la liguilla.