El gobernador de California (Estados Unidos), Gavin Newsom, ordenó a los ciudadanos que se cubran la cara con un cubrebocas en todo momento fuera de sus casas, debido a la creciente preocupación de que los casos de COVID-19 no han disminuido de la forma esperada en la reapertura.
“La estrategia de California para reiniciar la economía y hacer que las personas vuelvan a trabajar solo tendrá éxito si las personas actúan de manera segura y siguen las recomendaciones de salud. Eso significa cubrirse la cara, lavarse las manos y practicar el distanciamiento físico”, explicó Newsom.
Los únicos que no podrán llevar a cabo esta nueva normativa serán personas con discapacidades médicas, ya sea de salud mental o de desarrollo, y los niños menores de dos años.
Además, podrán no llevar máscara los clientes de restaurantes que estén comiendo o bebiendo en su mesa y las personas que hagan actividades recreativas cerca de su hogar, siempre que sea posible respetar las medidas de distanciamiento social.