El diputado local Manuel González, aseguró que la mayoría de las llamadas de extorsión a nivel nacional se realizan desde los penales de Nuevo León, por lo que urgió a la Secretaría de Seguridad Pública medidas para frenar este delito.
De acuerdo con estadísticas, en 2016 se denunciaron 626 casos, en 2017 la cifra aumentó a 678 y hasta agosto de este año se contabilizaban 645.
Por este hecho, el legislador priista solicitó al secretario de Seguridad, Aldo Fasci, un informe en el que se indiquen las medidas implementadas para inhibir la señal de los teléfonos celulares al interior de los centros penitenciarios.
Además, en una propuesta entregada en el Congreso Local se reitera que es obligatorio que los penales tengan instalados sistemas que permitan anular de manera permanentemente todo tipo de señales de comunicación.
