El esperado Superclásico entre Boca y River, ida de la final de la Copa Libertadores que debe disputarse esta tarde, está en peligro. Las fuertes lluvias que caen en Buenos Aires han anegado varias partes del campo de La Bombonera y aledaños y autoridades de la Conmebol han revisado el campo.
La lluvia es intermitente y se debe esperar a comprobar que el campo ha drenado bien el agua de forma que esté en buen estado para el partido de ida de la esperada final entre Boca y River Plate, el primero de la final de la Copa Libertadores.