Agencias / El Nacional
Barack Obama autorizó el envío de hasta 450 militares más a Irak para entrenar y asesorar a las fuerzas de seguridad de ese país que luchan contra los yihadistas del Estado Islámico (EI), anunció la Casa Blanca.
Así, se confirma que el Pentágono establecerá una nueva base militar en la provincia de Al Anbar (Irak) y enviará más tropas para llevar a cabo labores de entrenamiento y asesoramiento de las fuerzas iraquíes en la lucha contra los yihadistas del Estado Islámico, según informaron varios medios.
Estos militares adicionales “no actuarán en funciones de combate” y se unirán a “los 3 mil 100 soldados estadounidenses ya desplazados a Irak”, explica en un comunicado el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
Según el portavoz de Obama, el objetivo de este nuevo contingente será “entrenar, asesorar y ayudar” a las fuerzas iraquíes en una base en el este de la provincia de Al Anbar.
Estados Unidos pretende ayudar a los iraquíes a recuperar el control de la ciudad de Ramadi, capital de esa provincia, que está en manos de los yihadistas desde mediados de mayo.
Según la Casa Blanca, este nuevo esfuerzo “complementará” la tarea que ya realizan EU y sus aliados contra el EI en otros cuatro centros de entrenamiento en Irak, donde ya han sido capacitados más de 9 mil soldados locales y otros 3 mil están actualmente en formación.
Earnest indicó que Obama tomó la decisión de autorizar un envío adicional de tropas “a petición” del primer ministro iraquí, Haider Al Abadi, con quien se reunió el lunes en Alemania en el marco de la cumbre del G7, y por recomendación del Pentágono y los altos mandos militares de EU.
La autorización del presidente incluye, además, la “entrega rápida de equipos esenciales y material” a las fuerzas iraquíes, incluso a los combatientes tribales, en coordinación con el Gobierno de ese país.
Tras su encuentro con Al Ababi, Obama prometió que EU aumentaría “la capacitación y asistencia” a las fuerzas iraquíes que luchan contra los yihadistas.
Obama también dijo en Alemania que su Gobierno todavía no había desarrollado una “estrategia completa” para entrenar a las fuerzas iraquíes en la lucha contra los extremistas, lo que le ha valido críticas dentro de EU, principalmente entre legisladores y aspirantes republicanos a la Casa Blanca.
EFE