Redacción / El Nacional
Un ataque suicida en un mercado rural de Nigeria dejó un saldo de ocho personas muertas y 14 heridos, de acuerdo a los testigos, que culparon de los hechos a los extremistas de Boko Haram.
“La mayoría de los cuerpos estaban mutilados, sin cabezas y otras partes”, dijo Lami Aboki, uno de los vendedores en el lugar.
El legislador estatal, Jerry Kundisi, dijo que el estallido dejó al menos nueve muertos, incluyendo al perpetrador, y otras 14 personas lesionadas.
El comerciante de ganado Abubakar Musa señaló que estallido se dio cerca del mercado de ovejas y narró a The Associated Press que contó nueve cadáveres en el lugar.
Pero algunos otros testigos, entre ellos Abubakar Garba, quien iba de compras, dijeron que aparentemente la bomba había sido plantada en un camino de tierra entre el mercado de ovejas y los locales de vegetales.
El atentado en Garkida, una población rural a 165 kilómetros (100 millas) al norte de Yola, capital del estado de Adamawa, fue uno más de la serie de ataques ocurridos desde que fuerzas multinacionales desmantelaron el llamado califato islámico de Boko Haram al expulsar a los insurgentes de todos los pueblos del noreste del país.
Boko Haram recuperó el pueblo fronterizo de Marte, el sábado, el ejército informó de la destrucción de 10 campamentos insurgentes en la selva.
Ese mismo día, los extremistas islámicos atacaron el recientemente recapturado pueblo de Sabongari Yandulam, en la provincia nororiental de Adamawa, en donde murió un hombre y seis mujeres fueron secuestradas, de acuerdo a testigos.
En la operación más atrevida, la semana pasada cientos de combatientes de Boko Haram intentaron abrirse paso a disparos rumbo a la base militar más grande en el noreste del país, Giwa Barracks, en Maiduguri, pero las tropas locales defendieron exitosamente su base.
