Un ataque suicida del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Manbij, Siria, dejó como saldo 16 muertos, entre los cuales se encuentran cuatro soldados estadounidenses.
El portavoz de la coalición internacional antiyihadista liderada por Estados Unidos precisó el ataque a causa de “una explosión cuando realizaban una patrulla de rutina”. Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), el ataque se produjo cerca de un restaurante del centro de Manbij, en el norte del país.
Entre los otros 12 muertos hay cinco combatientes de una milicia árabo-kurda que acompañaban a la patrulla estadounidense, señaló la oenegé.
De acuerdo con informes, se trata del primer ataque suicida en Manbij contra la coalición internacional desde hace diez meses.
El EI afirmó en un comunicado en la red Telegram que al ataque fue realizado por el “hermano kamikaze Abu Yasin al Shami”, quien hizo detonar su chaqueta llena de explosivos al paso de una “patrulla con miembros de la coalición cruzada”.
En 2016, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), apoyadas por la coalición internacional, echaron al EI de Manbij. En 2017, el Pentágono informó que tropas estadounidenses habían sido desplegadas en este sector.
A pesar de las derrotas infligidas al EI, que vio los territorios bajo su control reducirse a una mínima expresión, el grupo yihadista aún logra perpetrar ataques mortíferos. Liderada por Estados Unidos, la coalición opera en Siria contra el EI desde 2014, principalmente apoyando a las FDS.
El ataque de este miércoles ha sido el más letal para las fuerzas estadounidenses en Siria, según cifras del Pentágono, que en los últimos años informó de dos estadounidenses muertos en combate en ese país en dos episodios distintos.
Este tuvo lugar tras el anuncio en diciembre de la próxima retirada de 2.000 efectivos estadounidenses de Siria. El presidente Donald Trump justificó esta decisión asegurando que el EI había sido derrotado.
Redacción/ El Nacional