Redacción/El Nacional
Después de que la justicia Australiana anulara los comicios que se llevaron a cabo el pasado mes de mayo, ahora tendrán que volver a elegir presidente en unas nuevas elecciones.
En una decisión sin precedentes, el Tribunal Constitucional austriaco dio la razón este viernes al Partido de la Libertad (FPÖ), que contestaba el resultado de las elecciones tras la derrota de su candidato, Norbert Höfer, contra el candidato ecologista Alexander Van der Bellen.
El recurso interpuesto por el líder del Partido de la Libertad (FPÖ), Heinz-Christian Strache, contra las elecciones del 22 de mayo ha sido retenido”, anunció Gerhard Holzinger, presidente del Tribunal.
Pese a que durante el escrutinio no hubo denuncias ni por fraude ni por manipulaciones, en las elecciones del 22 de mayo se produjo un cúmulo de negligencias durante el recuento de papeletas en urna y en el voto por correo que pusieron en cuestión la validez del resultado debido a lo estrecho del margen de victoria del candidato ganador: el candidato ecologista Alexander Van der Bellen solo ganó por 30.863 votos.
Como primera consecuencia de este escenario inédito en esta república de 8,7 millones de habitantes, la segunda vuelta de las elecciones será anulada y se organizarán unos nuevos comicios, sin duda en otoño.
El candidato ecologista Alexander Van der Bellen, que ganó con un 50,3% de los votos, debía estrenar el cargo el 8 de julio. Ahora, la presidencia de la cámara baja del parlamento cumplirá sus funciones de forma interina.
El futuro de Austria en la UE podría convertirse en uno de los temas centrales en la campaña a venir, mientras que el FPÖ, una de las formaciones de extrema derecha del continente con mayor implantación electoral, se ha aliado con el Frente Nacional francés en el seno del Parlamento de Estrasburgo.
En un contexto político agitado por el resultado del referéndum británico sobre la permanencia de Reino Unido en la UE, el PFÖ milita, al igual que el FN, por una Europa “a la carta”. Y aunque jamás ha reclamado una consulta al estilo británico, recientemente ha endurecido su postura, exigiendo reformas en el funcionamiento de la Unión.
Como segunda consecuencia, Van der Bellen, que debía estrenar el cargo el 8 de julio, no será investido. Ahora, la presidencia de la cámara baja del parlamento cumplirá sus funciones de forma interina.
El presidente y los dos vicepresidentes del Consejo Nacional, la cámara baja del parlamento, entre los que se encuentra el propio Hofer, cumplirán interinamente con las funciones del cargo hasta las próximas elecciones.