Mediante un comunicado proporcionado por la Santa Sede en Roma el día de hoy martes, se informó que el sacerdote austriaco Hermann Geissler, tras ser acusado por una monja de abusos en una confesión en 2009, renunció a su cargo como jefe de oficina (capo ufficio) en la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Tras haber solicitado “abandonar su servicio”, el prefecto Luis Ladaria Ferrer fue el encargado de aprobar la petición.
“El Padre Geissler dio ese paso para limitar el daño ya acarreado a la Congregación y a su comunidad. Defiende que la acusación contra su persona no es cierta y pide que se continúe el proceso canónico ya iniciado”, se lee en el comunicado.
La encargada de levantar la acusación contra Geissler fue la ex monja alemana Doris Wagner-Reisinger quien aseguró que el sacerdote abuso de ella durante una confesión en 2009 en Roma.
Hasta el momento el clérigo se ha reservado la opción de presentar acciones legales contra dichas acusaciones.