Redacción/El Nacional

A 130 años de su fundación, la revista National Geographic admitió que fomentaba el racismo durante décadas.

La editora Susan Goldberg reconoce que para mejorar, deben reconocer y aceptar el pasado. La conclusión llegó luego de una evaluación que la propia publicación confió a un historiador, el cual al revisar las converturas de la revista se encontró que hasta 1970, la revista ignoró casi totalmente a la gente de color que vivía en Estados Unidos.

Se reconoció que durante dicho periodo las personas de raza negra eran representadas como gente exótica, generalmente desnuda, como cazadores-recolectores, nobles salvajes.

Los americanos recibían ideas sobre la vida en otras partes del mundo de películas y dibujos animados racistas, como Tarzán. Además existían leyes de segregación.

“En este contexto, National Geographic no enseñaba nada, sino que se limitaba a reforzar estos mensajes racistas”, concluye Mason, profesor de la universidad de Virginia.

Un ejemplo fue una nota sobre Australia en la que aparecen fotos de aborígenes sobre la frase:

“Negros del sur de Australia: estos salvajes figuran en las posiciones más bajas de inteligencia entre los seres humanos”.

Pero aquellos años han quedado atrás y la revista sobre geografía, historia y ciencia ha emprendido una especie de reconciliación.