Edgar Martínez/ El Nacional
Fue un 11 de agosto del 2012 cuando la Selección Mexicana de Futbol, comandad por Luis Fernando Tena, se alzaría con la medalla de oro en las Olimpiadas de Londres presea que jamás se había obtenido en la historia del deporte en el país, ganándosela nada más y nada menos que a Brasil por marcador de 2-1.
El combinado tricolor comenzó la larga ruta hacia el oro a finales de octubre, consagrándose campeón de los Juegos Panamericanos con sede en la ciudad de Guadalajara derrotando 1-0 al cuadro de Argentina, certamen que terminó invicto.
Para el 2012, el reto llegaba para Tena y sus pupilos, pues tenían que llenar las expectativas que el Tri de Hugo Sánchez en el 2008 no pudieron hacer, y con una actuación bastante convincente México accedería a los JO de Londres ganando todos sus duelos del Preolímpico, aclarando cualquier duda hacia este cuadro.
Se llegaba el momento de la verdad, México ya se encontraba en las Olimpiadas teniendo como meta por lo menos estar dentro de pódium, comenzando el certamen con dos empates que hacían volver las dudas hacia Tena como técnico, sin embargo, la victoria frente a Suiza devolvió la fe en ellos de poder hacer algo más.
El combinado azteca fue de menos a más y culminó la fase de grupos accediendo a las rondas finales con la esperanza de colgarse una medalla. En Cuartos de Final, México venció 4-2 a Senegal de manera dramática llegando hasta los tiempos extras para poder acceder a las semifinales.
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En la antesala a la final, Japón era el rival a vencer para asegurar presea olímpica, siendo un 3-1 definitivo el que les dio la oportunidad de disputar el título de campeón en el mítico estadio de Wembley.
https://www.youtube.com/watch?v=mCoejevEoas&t=323s