Jesús Esquivel /El Nacional
Hoy hace 30 años, Diego Armando Maradona, marcaría uno de los mejores goles en la historia del fútbol, pero también en ese mismo partido, marcaría su famoso gol, la mano de Dios, en un partido contra Inglaterra en el Mundial de México 86.
El 22 de Junio de 1986, el Estadio Azteca fue testigo de una gran tarde de futbol, Argentina e Inglaterra se disputaban el pase a las semifinales de aquel torneo, un partido con mucho morbo, ya que cuatro años antes se había producido ‘‘La Guerra de las Malvinas’’.
Al medio tiempo el marcador iba 0-0, pero Diego ya era factor en el partido, al minuto 6 del segundo tiempo, Maradona tomó el balón en el área, se la dio a Jorge Valdano, pero la esférica fue interceptada y lanzada al aire por el defensa Steve Hodge.
Maradona por la inercia de la jugada siguió corriendo y se encontró con el balón, ‘el pelusa’ metió un brinco, puso el puño en la cabeza, el balón rebota en el puño y vence al portero Peter Shilton. Los ingleses reclamaban pero Diego festejaba, sabía lo que hizo pero decidió callar. Los medios llamaron a eso ‘La Mano de Dios’.
Justamente en ese mismo partido, al minuto 55, Diego parte de media cancha con balón controlado, eludió a seis jugadores ingleses: Glenn Hoddle, Peter Reid, Kenny Sansom, Terry Butcher, Terry Fenwick y al arquero Peter Shilton antes de rematar y convertir el tanto. En el 2002 ese gol fue nombrado como el más hermoso en la historia de los mundiales.
Posteriormente Argentina sería campeón de ese mundial venciendo a Alemania Federal en un grandioso duelo de final.
